En la actualidad, Tesifonte Coscojuela, el surfista esquimal, vive en una zona muy calurosa del planeta, y todavía ha de esperar una semana para que le instalen el aire acondicionado. Pero Tesifonte es un tenaz superviviente que siempre utiliza todos los medios a su alcance para lograr sus objetivos.
Primero se desnuda y practica una serie de estiramientos de espalda, empezando, como le enseñó su profesora de surf, por la parte cervical y bajando hasta la zona lumbar, ya que la torsión del cuello que debe realizar para colocar su cabeza donde tiene pensado, requiere de un complicado ángulo que castiga la columna con severidad.
Después de calentar, introduce su cabeza rapada en el estante del frigorífico más apropiado a su altura. Para ello tiene que resituar el acopio de grasa de foca, así como una butifarra negra y otra blanca. Por razones que él desconoce —y yo no lo atribuyo a la etnia— la negra siempre supera en tamaño a la blanca.
Una vez iniciado el proceso de enfriamiento, Tesifonte empieza a experimentar los primeros resultados. La agradable sensación de frescor en el occipucio, combinada con la sobrecogedora visión en macro del par de símiles fálicos de carne, ofrece al conjunto una peculiar perspectiva bizco-estrábica, solo disfrutable en la más estricta intimidad. En caso de que la temperatura ambiente sobrepase los cuarenta grados Celsius, Tesifonte complementa el antigolpe de calor metiendo los pies en el hueco del cajón bajo del combi.
Por último, constatar que como además es previsor, antes de meter la cabeza en el frigorífico, Tesifonte se ha metido la tarjeta sanitaria en la boca, ya que puede distraerse y permanecer ahí más tiempo del razonable, entrando en un estado paulatino de semiinconsciencia y precongelación, que impediría el normal funcionamiento de cualquier órgano destinado, por ejemplo, a marcar el número de urgencias.
Así es Tesifonte Coscojuela, el surfista esquimal, de nuevo al límite de un mundo insólito.
Tendría que aprender de él y eso que soy surfera, pero su método no se me ocurrió ponerlo en marcha en la semana infernal que tuvimos en el norte.
ResponderEliminarLa mayor de las veces, la necesidad agudiza el ingenio.
EliminarEstá visto que a mi el calor excesivo me mata la neurona y el ingenio :))
Eliminar¿Quién coño es el tal Tesifonte? Pásame su número que le voy a pedir que me de un par de clases de refresco. Cuando yo surfeaba no se llevaban estas técnicas tan sofisticadas de calentamiento, xD :))))
ResponderEliminarEl video de encanta, la puesta en escena muy en mi línea... He disfrutado de ambas partes del post ;)
¿No sabes quién es Tesifonte Coscojuela? Adquirió gran fama en sus tiempos de surfista. Toda una leyenda, y si no que se lo pregunten al tiburón unidentol. Celebro que hayas disfrutado la entrada.:)
EliminarUn genio. Tengo una camiseta suya firmada. No se te ocurra cuestionar su método, está muy por encima del alcance de comprensión de los simples mortales.
ResponderEliminarSolo los locos sobreviven y cambian el mundo.
EliminarTesifonte tiene nombre de medicamento.
ResponderEliminarDe esos raros que se venden con prescripción médica, y que luego ni curan ni palian.
EliminarEso mismo JAJAJA
EliminarY después de todo el ejercicio acrobático
ResponderEliminar¿Quién le cierra la puerta de la nevera al gran Tesifonte? ¡un sinvivir!...
Diría que nadie. Pero se ve que si cabeza y pies están refrigerados, el antigolpe de calor se produce y el resto del cuerpo sobrevive a las altas temperaturas. Eso sí, la comida que hay dentro puede que se eche a perder.:)
EliminarYo metería en el cajón bajo, junto a los pies de Tesifonte, al tiburón unidentol para que le cortará las uñas con su diente cortador. Creo que Tesifonte (Tesi para los amigos) lo agradecería.
ResponderEliminarEs una remota posibilidad, pero, al fin y al cabo, vivimos en un mundo insólito y me consta que, entre Tesi y el tiburón unidentol hay una relación, digamos, especial.
EliminarCon el doble sentido de las butifarras me ha entrado hasta una arcada. Como supongo que era tu objetivo como escritor conseguir eso, ¡FELICIDADES! Reto desbloqueado jajaja
ResponderEliminarAy, Speedy, es que tú vas más allá.,,;)
EliminarMe ha parecido hasta tierno lo de la tarjeta sanitaria. Después de todo Tesifonte no es un imprudente, es un profesional que piensa en todo.
ResponderEliminarBesos.
Hola. Así es. No deja cabos sueltos.:)
EliminarTiene buenas ideas este Tesifonte, mantener la cabeza fría es un punto importante para alejar el calor, además con la tarjeta sanitaria en la boca, por si acaso. Muy inteligente. .
ResponderEliminarCierto, casa bien el ingenio conciertos grados de locura.:)
EliminarCualquiera puede cometer un pequeño error y terminar en el otro barrio, no hay dudas de ello.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Claro, antes conviene llevar a cabo un protocolo de seguridad.
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