La ciudad en la que vivía el loco estaba siendo bombardeada con publicidad navideña desde mediados de noviembre. Para contrarrestar la contaminación acústica de los villancicos de su entorno, el loco subía el volumen de su música y de paso se abstraía de la gran maniobra de distracción en la que estábamos inmersos. El loco seguía convencido de que la Navidad era un gran espectáculo superpuesto, ideado para que la realidad quedara relegada a un plano muy remoto y complicado.
El loco bajó a la calle, giró sobre sí mismo y observó que en tres de cada cinco balcones trepaba un Papá Noel inanimado. Así que como siempre por estas fechas, vistió de Papá Noel a su última víctima del año para contribuir a la tradición. Los viandantes nunca apreciaban nada fuera de lo común. Como mucho comentaban entre risas que pocos regalos dejaría en casa ese pobre Papá Noel estando colgado del cuello. Así de estúpida era la Navidad, pensaba el loco, mientras sonreía tras las cristaleras de su balcón y el año se precipitaba a su fin con otro niño menos en la ciudad.
Bueno, no estará tan loco, los papás noé son una maldita plaga, no se puede andar con tonterías con ellos. Exterminio!!
ResponderEliminarEl ataque navideño no tiene piedad y es omnipresente.:O
Eliminar¿Seguro que es un niño lo que ha colgado vestido de rojo? Lo digo porque llevo días buscando mi niña interior y no la encuentro.
ResponderEliminarTambién puede ser una niña, sí. El año pasado lo fue, jjjj.
EliminarSerás cabrito, anda mira a ver si es pecosa , conlleva dos trenzas debajo del gorro y tiene ojos verdes que me pasó a recogerla 😁😁😁
EliminarYa es demasiado tarde: lleva ahí colgada tres días. Y yo no me acerco a la casa del loco ni loco:)
EliminarOstras, parece el alter ego de Krampus!! Estamos rodeados de locos y de decoraciones dementes ... En lugar de matarnos la maceta del balcón nos matará un Papá Noël este año?? :))
ResponderEliminarSi la soga de la que pende el pequeño aguanta, no creo que haya problema.;)
Eliminarjaja Está claro que esta entrada tuya destila tu debilidad innata por la Navidad : ) …en contra de lo que puedas suponer, la Navidad ni aumenta, ni disminuye la estupidez…sigue al mismo nivel de lo habitual en cada uno. En mi caso, podría ser que como nunca me entero de nada de lo que ocurre a mi alrededor, efectivamente no viera a ese pobre colgado, pero vamos, que eso me pasaría en pleno agosto exactamente igual: )
ResponderEliminarPor supuesto que la aumenta. Y por supuesto que el grueso de la ciudadania hacen gala de ello, no sólo en estas fiestas y en agosto, sino durante toda su vida.:))
EliminarMe parece que en esa ciudad había muchos locos y no todos estaba diagnosticados ;)
ResponderEliminarExacto, Beauséant. Los que pasan bajo el balcón del loco tienen una locura menos visible, pero en cierto modo más perturbadora.
Eliminar¿Herodes versión 3.0? :)))
ResponderEliminarhttps://youtu.be/XDJGFFp0a9k?si=AAyTYv0IxgzwqECT
;)
Este loco solo va a niño por año, jajaja.
EliminarYa se sabe que la navidad es para El Corte inglés y la hostelería...
ResponderEliminarLos demás solo ponemos cara de poker.
Solo te deseo lo mejor para estas fechas. Después, todo volverá a la normalidad.
Mil besitos navideños 💫🎄🤗
Gracias. Te deseo lo mismo.:)
EliminarY luego saldrás, te cruzarás con tus vecinos que ponen esos papa Noel inanimados y alguno hasta te felicitará la navidad y tu a lo mejor le sonreirás por educación. Pero muy en la línea de Patrick Bateman, el de American Psycho.
ResponderEliminarCreo que no bebes lo suficiente como para entender la belleza de la navidad. Venga, un traguito más de buen escocés.
Bebamos que falta hace. Incluso así seguiremos estando más lúcidos que los palmeros del gran espectáculo.
EliminarY encima nadie asocia con el loco la desaparición anual de un niño. En cuanto a lo segundo: no lo sé. Pero qué se puede esperar de una plataforma descuidada y obsoleta..)
ResponderEliminarY en los dos de los cinco balcones en los que no trepaba un papá noé, pronto veremos trepando también a melchores, gaspares y baltasares. La moda y la estupidez son contagiosas.
ResponderEliminarNo me cabe duda de eso, diego. Entonces será cuando el loco, en lugar de colgar a un niño por año, colgará a tres. O a cuatro según el humor.
Eliminar¡Qué fuerte!
EliminarAbrazos grandes.
Sara, esperemos que en este caso la realidad no supere a la ficción. Abrazos para ti también.:)
EliminarTodo muy práctico desde su punto de vista. :D Espero que no empiece a oler hasta después de Reyes. O igual prefiere eso al olor a mazapán.
ResponderEliminarUn saludo.
Jajaja, quizá ha pensado que con la abducción navideña nadie echará cuentas del hedor.
EliminarEn unos días, la Navidad habrá acabado.
ResponderEliminarY todos los niños de la ciudad estarán a salvo al menos hasta el próximo mes de diciembre:D
EliminarJolines, lo del niño me ha dado escalofríos.
ResponderEliminarBesos.
Supongo que para dar el pego con el tamaño del resto de muñecos, tenía que ser el cuerpo de un menor. El de un adulto hubiera cantado mucho.:D
EliminarDan un poco de grima esos "Papá Noel" colgados en todos los balcones...
ResponderEliminarBesos.
Es una muestra tan risible como bienintencionada de lo que consigue la tradición con el grueso de la ciudadanía.:))
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