El viernes por la noche los chicos de los coches robados estrecharán su relación con el peligro. Competirán por ver quién de ellos es el más rápido, y las zonas poco transitadas quedarán veladas por el humo de los neumáticos chamuscados. Algunos se llevarán la ovación del ganador y otros se dejarán la vida en el fuego del accidente.
Mejor eso que agonías hospitalarias. Mejor el fin que una lucha de resistencia contra la muerte en la cúspide del dolor.
Una noche más de viernes, las lolitas de más de veinte, los adolescentes de más de treinta y los jóvenes de más de cuarenta, serán sombras nocturnas en los puntos más calientes de la ciudad. Las que tengan la curvatura perfecta de glúteo enardecerán las pollas de la concurrencia en las pistas de baile, y los que tengan la condición adecuada de atrevimiento y poesía beberán la miel de los coños ociosos.
El viernes por la noche la trampa se agrandará y los pobres de espíritu rogarán al diablo por un poco más de narcótico. Corazones fracturados y almas vacías naufragarán en los prostíbulos, y los orgasmos sin amor se sucederán en oleadas de hastío. También las comisarías se llenarán de quienes hace tiempo gastaron el comodín de su salvación, porque el grado de violencia aumentará varias décimas pasada la medianoche.
Otro viernes de perdición se ahogará en la maldición de sus figurantes.
Parece una buena noche, con la adrenalina a tope.
ResponderEliminarEs la noche previa a las lamentaciones, derivadas por las decisiones tomadas.;)
EliminarHas conseguido sacarle poesía a la gilipollez. Y recordarme que el viernes por la noche no debo salir por cualquier sitio.
ResponderEliminarSí; según qué sitios son sinónimo de problemas aunque los evites.
EliminarTe ha salido una entrada en modo “fast and furious” pero en vez de en California o Sudamérica, así, más cercana, no sé, Vallecas o una de esas zonas poligoneras de la antigua ruta del bacalao, eso sí, con muchísima mejor literatura : ) Un abrazo!
ResponderEliminarComo más rural, ¿no?; donde se evoca antes al Jaro que a Vin Diesel.:))
EliminarJustamente, solo que "el Jaro" es un personaje, en realidad nuestro Vin Diesel, se llama ( o llamaba, que no sé si vive, porque el pobre quedó colgado de la heroína de los personajes que interpretó: ( José Luis Manzano, así que si te parece y con tu permiso, se la dedicamos a él, donde quiera que esté.
EliminarMuy bien.:)
EliminarJoder... como para invitarte a salir ahora....
ResponderEliminarJaja, mejor lo dejamos para el sábado.
EliminarMucho me temo que la búsqueda de embutido ibérico, y otros manjares exóticos seguirá latiendo, como cada viernes, al ritmo de la noche de un viernes cualquiera... la gente necesita soltar toda su adrenalina, de lo contrario los lunes serían un infierno para muchos :)
ResponderEliminarMira por dónde, tengo a medio elaborar una entrada sobre el comienzo del lunes. Es "bellísima" y deja esta a la altura del betún. Pero sí: en los fines de semana es cuando se suelta presión.:)
EliminarQué panorama nos pintas, es para salir pitando y no mirar atrás.
ResponderEliminarNo comento nada del video, no llegué a ver ni la mitad, por no ahondar más en ese escenario de apocalipsis total.
Jajaja. Ya pronto llegarán las entradas sobre la Navidad. Ya sabes, amor y paz y todo eso...;)
EliminarEl viernes noche tiene las horas contadas. Con el nuevo horario laboral de cuatro jornadas de curro semanales, el viernes noche pasará a ser ¡el jueves noche! La humanidad progresa :)
ResponderEliminarDiego, ¿tú crees que llegará a ocurrir un horario laboral así? Tengo mis dudas. En cualquier caso, en muchos trabajos como por ejemplo el mío, es algo impensable.
EliminarAcabas de describir mi antiguo barrio: noches que pintan bien y acaban en el futuro con alguna madre llorando.No falla.
ResponderEliminarUn besazo Cabronidas!
Hola, Morella. Debe ser algo así como la noche de los perdedores, porque nadie gana en noches como esa.:)
EliminarEn algunas ciudades, la noche se está sustituyendo por la tarde, 'tardeo' le llaman. Yo ya me he hecho mayor, y lo cierto es que ni el 'tardeo' ni el 'nocheo' me estimulan lo más mínimo. Donde se ponga un buen libro, una cervecita y el sillón...
ResponderEliminarSí, y el tardeo y trasnochar ha quedado para el recambio generacional. Yo estoy cómodo en mi papel de observador.:)
EliminarMientras se maten solo ellos y no se lleven a nadie más en el camino, cosa que nunca sucede...
ResponderEliminarSaludos,
J.
Sería lo suyo en un mundo ideal, sí.
EliminarEl desfogue del viernes siempre ha sido muy venerado... luego con los años solo te desmayas en el sofá con pizza y cerveza y con suerte no roncas al primer capítulo de la serie de Netflix :P
ResponderEliminarPese a la edad, si llegas a tu casa sin percance, aunque sea en solitario, no está nada mal tal y como están las cosas. :D
EliminarEl lado salvaje de la noche de viernes. Poesía y realismo de la mano. Muy bueno tu lirismo sucio, hasta dan ganas de darse una vuelta pisando el acelerador hasta el fondo.
ResponderEliminarBueno, pero fíjate bien en los pasos de cebra, a ver si va a cruzar algún peatón descerebrado con su semáforo en ojo.;)
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