19/4/21

23. La parálisis

    Hubo una tarde veraniega en la que me encontraba sentado en el campo en plena meditación, como un discípulo de Osho a punto de levitar. Alguien a mi lado me pasó un sebsi y, en un gesto de ignorancia consciente, inhalé el humo del polen de la planta del kifi. La percepción de mi entorno transmutó y entré en plena comunión con la naturaleza: la brisa danzaba a mi alrededor arropándome con embeleso; la hierba crecía en un susurro de profunda cadencia y los árboles orquestaban una hechizada coreografía de ensueño. En resumidas cuentas: se me quedó cara de gilipollas y no podía moverme.

    Durante un lapso inconcreto de tiempo, estuve sumido en una agradable y sedante parálisis que se vio interrumpida por una legión de hormigas que pugnaban, encarnizadas, por mordisquear con saña el forro de mis pelotas.

    Nunca más repetí tan evocadora experiencia hasta que hace poco me desperté y no podía moverme. Y no porque estuviera esposado a la cabecera de la cama de alguna ramera chiflada, experimentando con lo extremo; o encadenado a un altar de sacrificios de alguna secta de acólitos enfermos de fe. Estaba acostado en mi habitación, cuando en el mismo instante en que tomé absoluta consciencia de que estaba despierto, también lo hice de que estaba paralizado de pies a cabeza. La ciencia lo llama parálisis del sueño. Durante los dos o tres minutos que dura, la naturaleza pasa de ti, se te queda cara de profundo acojone, te preguntas qué mierda te está pasando, y la única realidad es una inmovilidad nunca antes experimentada que no hace ni puta gracia.

    Ni que decir tiene que es mucho mejor la parálisis inducida del kifi.


18 comentarios:

  1. Madre del amor hermoso, me extrañaba que comenzara todo de forma tan idílica, hasta cuando hiciste el resumen que dije: "Este es Cabrónidas", pero no imaginaba qué angustia por las hormigas y por lo que no son las hormigas. Te has superado.
    SAludos angustiosos.

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    1. Jaja, gracias. Espero que nunca sepas lo que es la parálisis del sueño.

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  2. Sin duda que tiene que ser mejor la parálisis por kifi que la otra ya que esta ultima tiene que ser muy agobiante.
    La próxima vez que vayas al campo mira antes si hay hormigas, pues se pueden esconder en cualquier sitio.

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    1. No hay duda. Y al campo, si te vas a sentar, mejor llevar una silla plegable.

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  3. La sensación de la parálisis del sueño es muy angustiosa.

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    1. Diría por tus palabras que la has experimentado.

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    2. Y dirías bien. Por desgracia 3 veces en mi vida, en mi caso se dieron al despertar. Y es una sensación angustiante, no es peligroso, pero sí es indescriptible.

      Menos mal que solo fueron esos 3 episodios y no se ha vuelto a repetir.

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  4. He sentido esa sensación 2 veces en mi vida y es horrible. Desde luego, que mal se pasa.

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  5. Me ha encantado lo bien que has escrito y descrito tu viaje jjaja. Que bien escribes.

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  6. Compañero…

    He vivido la parálisis del sueño dos o tres veces y sí, es exactamente eso: el cuerpo en huelga, la conciencia chillando y una sensación entre “me muero” y “qué broma más cabrona del sistema nervioso”. En una de ellas, hace ya unos años, logré salir lanzándome de la cama en un angustioso alarde de puro pánico. Recuerdo que intentaba suplicarle a mi mujer que me moviera, que me despertara de una maldita vez, porque me costaba respirar. Estaba boca arriba y sentía que me iba a ahogar (tenía apneas)… Ella, tranquila, leía a mi lado con su Kindle. Yo, mientras tanto, atrapado en un cuerpo que no respondía, sin poder hablar ni moverme.

    Malos recuerdos, muy malos. Lo peor es esa impotencia absoluta, total. Dicen que no hay que entrar en pánico, que hay que respirar profundo e intentar mover un dedo. La última vez me ayudó, algo, pero aun así… es una experiencia cruda.

    Y dejando de lado el rollazo que acabo de soltarte (me ha poseído el trauma jajaja), qué maravilla este cortometraje psicotrópico en 4D con banda sonora de insectos y monólogo interior sin filtro. Te juro que he sentido a la hormiga reptar mientras el alma se me quedaba en modo espera.

    ¡Un abrazo!

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    1. Qué tal, Tarkion. Por el momento la he padecido unas tres veces y es una sensación angustiosa, al menos la primera vez si encima no sabes lo que es. E incluso sabiéndolo mejor no experimentarlo. Al menos, como con casi todo, nos podemos reír de ello, ja, ja. Otro para ti, compañero. :)

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  7. Nunca me ha pasado, pero leyendo tu experiencia, tan bien contada, nota mental: cuidado con los bichos, jaja, bueno, ahora un poco más en serio, tiene que ser agobiante. Abrazo !

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    1. Los bichos, quizá vieron una gran fuente de alimento, ja, ja, ja. Quién sabe.

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  8. Buenas Cabrónidas!!
    Uff a mi me pasó una vez, y con esa me basta para esta vida, la próxima y cualquier otra reencarnación por la que tenga que pasar.
    Se supone que suelen pasar por estrés o situaciones traumáticas, pero claro, igual si te fumas un cigarrito con un toque mágico de herbolario clandestino...pues igual es normal que se cuele alguien del más allá a dejarte inmóvil.
    Un abrazo mientras estemos despiertos, y con los ojos bien abiertos, que luego pasa lo que pasa

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    1. Hola, Finil. Me informé al respecto y es, bien por estrés, por trauma o por tener los ritmos circadianos jodidos. En mi caso fijo que es lo último. :)

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    2. jajaja mejor no digo nada...

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