17/10/22

179. Guerra al mono

    El otro día observaba desde cierta distancia, cómo una pandilla de cinco chavales preadolescentes, jugaban a chutar un balón contra una construcción considerada patrimonio histórico cultural de la urbe. Puesto que pertenecen al vecindario del cual formo parte, los conozco y sé que son buenos zagales si nos atenemos a los parámetros políticos y gubernamentales. Es decir, reciben la formación obligatoria en un colegio concertado, son chicos educados que no vociferan más de lo permisible para su edad, y ni escupen ni vomitan, ni se mean en las esquinas (de momento). 

    Los padres, a los que también conozco no más allá de una relación cordial entre vecinos, son honrados conciudadanos que pagan sus tributos y que, como mucho, se quejan del calor que hace en verano, del deterioro premeditado del barrio y del frío que hace en invierno.

    Pero ¡ah, la vida en la gran ciudad! La policía municipal considera que no es una actividad responsable chutar un balón de reglamento contra una edificación tan antigua, puesto que hace peligrar la integridad física de los paseantes por un posible derrumbe. Así pues, una patrulla de uniformados funcionarios de la ley y el orden, les ha requerido la filiación y acto seguido les ha requisado el balón, poderosa arma mortal por todos conocida.

    Yo, que aunque pueda no parecerlo, soy persona ponderada, comprendo la dedicación de estos abnegados esbirros que velan día y noche por nuestro bienestar sin pedir cuentas, y que la mayoría de veces sufren en sus torturadas almas la incomprensión de aquellos a quienes con tanto ahínco protegen. Por lo tanto, agradezco a estos bizarros avalistas de la ley, que nos hayan librado de los terribles peligros que entraña una pelota en manos de una muy bien camuflada célula de niños destructores.

    ¡Hostia puta mandarina!


28 comentarios:

  1. Bueno, yo les hubiera llamado la atención si estaban dando pelotazos donde no debían. Si de verdad había motivo de derrumbe me parece más que justificado el toque. Pero no me hubiera quedado el balón, los hubiera mandado a otro sitio.
    Aquí es cada vez más difícil ver a preadolescentes con un balón, normalmente un móvil es la extensión de sus manos.

    Besos.

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    1. Hola. Supongo que la sustracción del balón es para causar efecto y que les será devuelto, jajaja

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  2. Está demostrado que allí donde no haya actividades demasiado peligrosas para el trabajo del uniformado ni de nadie, allí estarán ellos haciendo su trabajo de rutina. En casos más peligrosos hay de todo.
    Me parece muy excesivo lo de requisar ese balón. Pero ya digo. Ese es un modo fácil de hacer ver que estás haciendo algo.

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    1. Es que es excesivo. Yo creo que lo hicieron para que los críos alucinaran un poco.

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  3. Veo que nadie ha tenido en cuenta los sentimientos del balón, quizás salió ganando al estar requisado, imagínate lo que debe ser que te estén dando patadas toda la tarde y rebotándote contra una pared. Yo me solidarizo con el balón 🤔

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    1. Jajaja, bueno. Podemos considerar la posibilidad de denunciar a la UEFA y a la liga profesional de fútbol por maltrato. Y si entra a trámite, ir a por todas las ligas del mundo.

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  4. Niño, deja ya de joder con la pelota...

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    1. Todo un clásico, aunque ellos, siguieron el protocolo.

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  5. Claro¡ eso pasa, y les devuelven el balón, y vuelven a las cabronadas. Un abrazo. Carlos

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    1. Hola. Supongo que los críos después de eso, respetarán las edificaciones consideradas patrimonio cultural y maltratarán el balón contra paredes del extraradio llenas de grafitis.

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  6. Yo creo que la policía les requisó el balón porque era mucho mejor que la pelota de goma deshinchada con la que los abnegados funcionarios de la ley y el orden jugaban en el patio de su cuartel.

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    1. Jajaja, vieron ahí su oportunidad y la aprovecharon. Hasta un balón incautan.

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  7. Pobrecillos. ¿No tendrán gente peligrosa a quién perseguir? Se pasaron...

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    1. Había que proteger aquella antigua edificación como fuera.:))

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  8. Creo que con tan solo avisarlos, los niños se habrían ido a otro lado. Lo de requisar el balón, me parece excesivo.

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    1. Yo también lo vi excesivo hasta el punto que tuve que escribir la entrada. Creo que lo hicieron para quedarse con los chavales. Casi tengo curiosidad por averiguarlo.

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  9. En mi breve y limitada experiencia con nuestras queridas fuerzas de seguridad puedo decir que a veces me costaría distinguirlos de los delincuentes de los que dicen protegernos de no ser porque llevan uniforme.

    Cuando tienen un mal día o quieren marcar paquete siempre encuentran alguien con quien poder meterse. Hace muchos años tuve bronca con un par de ellos por comerme un trozo de pizza y una coca cola en un banco, éramos dos personas y eso entraba en su concepto de botellón. Lo dicho, tenían un mal día.

    En fin, que miedo me da el día que tenga que recurrir a ellos para algo urgente...

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    1. Hostias, Besauséant, eso que dices aún me descoloca más que el hecho de requisar un balón porque lo estrellaban contra una edificación protegida. O sea, en un banco solo puedes estar sentado sin estar haciendo nada más. ¿No es la vida un inagotable caldo de cultivo que da para mil entradas?

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    2. A mi también me dejo muy pensativo eso, la verdad... era cuando estaban a vueltas con los botellones y creo que cada policía interpretó la ley como quiso... vamos, lo que hacen siempre :)

      La vida es la mejor inspiración, eso seguro, el problema es saber escribirla sin que parezca ficción :)

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    3. Por mucho que lo parezca, siempre llega una dosis de realidad y nos da una lección.:)

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  10. No sé yo si con solo detenerse y hablar con ellos hubiese sido suficiente, dices que pertenecen al vecindario y son buenos chicos, a veces no se dan cuenta y solo es orientarlos un poco, o hablar con sus padres, eso de quitarles el balón, me parece ilógico, el correctivo lo imponen los padres, ellos al ser menores están bajo tutela, pero, es otro país y son otras leyes.

    Con todo y lo malo que pudiera (y tiene) México, lo menos que hacen, si son adolescentes, es llevarlos detenidos, luego, a llamar a los padres, si son pre, allí lo resuelven, con los padres presentes, por supuesto.

    Hubo un tiempo, hace años, se desató ''el arte'' de los adolescentes y noche a noche deambulaban por la oscuridad haciendo grafiti en cuanta pared encontraban, pero solo en áreas residenciales, si llegabas a pasar por colonias populares estaban limpias, sin un tachón. Me cansé de mandar pintar y dejarles un lienzo limpio y así continuaron por alrededor de un mes, los veinticinco metros de pared por tres de alto fueron llenados en su totalidad, cuando volvía a casa, evitaba esa calle para no ver todo lo que habían hecho. En una ocasión, al volver a casa no tuve más remedio que llegar por allí y vi una patrulla estacionada y un montón de jovencitos repartidos en varias casas, pintando las paredes, incluida la mía, en pleno sol de las dos de la tarde, cuando llegamos a cerca de cincuenta grados, me acerqué al policía y pregunté qué sucedía y me dijo que la noche previa los habían atrapado, siendo menores, les llamaron a los padres y éstos, al no entrar en razón y negar que sus hijos eran responsables tuvieron que imponer un correctivo antes que enviarlos a correccional y los pusieron a pintar todo, los padres fueron obligados a comprar montones de botes de pintura blanca, di un tiempo, creyendo que volverían a hacerlo, luego mandé igualar el color. A los chicos les advirtieron que, si una pared volvía a estar rallada, los llevarían a correccional y los chicos, no sé, o pasaron la voz, o se dedicaron a vigilar, jamás volví a tener esos problemas.

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    1. Yo creo que la poli actuó así para acojonarlos un poco y de esa manera hacerles creer que la habían cagado, pero bien.

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  11. Menos mal que están ellos para desmantelar estos grupos de terroristas potencialmente mortales.
    Qué bien se vive en el estado de confianza.

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    1. No me cabe duda de que vivo en un barrio "seguro".

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  12. Quizá una amonestación verbal hubiese bastado...pero es que hoy en día eso ya no sirve para nada... todo depende de esos críos... los que hay en mi barrio son de otra pasta. Cuando saco a los perros alucino con los niñatos.
    Besos.

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    1. Al igual es que los polis estaban ya de vuelta de todo. Ya no querían sorpresas.

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  13. Todo el que haya jugado en un patio de recreo petado de niños sabe que los balones de reglamento los carga el diablo. Esto es así y es así ;P

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    1. Supongo que el alumno pelota del diablo adiestró a los polis.:)

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