La cabalgata fue dura pero mereció la pena, ya que por primera vez desde que el mundo es mundo, toda persona que lo deseó o escribió la carta recibió su regalo; incluso los niños que se portaron mal. Costó convencer a Krampus de esto último. No se le metía en su astada cabeza que no son los niños sino los adultos los que se portan como no deben. Pero al final entendió que la Maquinación exigía ciertos sacrificios. Y no me refiero al trato que recibieron los de siempre, que ahora ya no son los de siempre, sino los de antes, jajaja.
En cuanto a nosotros, los cuatro amigos, nos sentíamos tan sorprendidos como satisfechos y decepcionados. Sorprendidos por los sentidos aplausos que recibió la Maquinación por parte de centenares de organizaciones animalistas. Satisfechos porque la Maquinación fue un éxito sin parangón. Y decepcionados porque la prensa mundial, después de los resultados forenses, sólo se hacía eco de que los cuerpos que las autoridades encontraron en el Polo Norte, decapitados e incinerados junto con el trineo, correspondían, en efecto, a Papá Noel y a los tres Reyes Magos.
Ahora estoy hablando con los chicos por videoconferencia, sobre el tremendo impacto que ha causado nuestra gran gesta. A los niños y niñas no parece importarles quién o quiénes han tomado el relevo. Al menos no a los que solo recibían infelicidad o nada en esta fechas señaladas. En resumidas cuentas, ahora somos nosotros, los cuatro amigos, la maquinaria no lucrativa encargada de impartir felicidad a todo lo largo y ancho del globo, sin excepciones ni diferencias.
Mientras intercambiamos impresiones, acierto a ver que Satán Claus tiene la cabeza de Nicolás de Bari sembrada de dardos y fijada a media altura en la pared que tiene a su espalda. Krampus, en cambio, de pezuña a pezuña y de hombro a hombro, pasando por el peludo pescuezo, cuando no la ingle, ejecuta habilidosos malabarismos con la cabeza de Baltasar.
No como el Grinch, al que me uno a su desagrado por los villancicos, que prefiere que sea su perro Max el que juegue con la cabeza de Melchor, la cual mordisquea sin descanso mientras la hace rodar de un lado a otro. En cuanto a mí, claro, tengo la cabeza de Gaspar, a la que le he realizado una trepanación en la zona parietal, con el fin de utilizarla como base para la quema de incienso y velas aromáticas.
Ya sabéis, para ahuyentar las malas vibraciones.
Así pues, en un ambiente familiar y distendido, los cuatro amigos concluimos que ha merecido la pena y que, por supuesto, la noche del 24 de diciembre de este año y la del 5 de enero del que viene, volveremos a actuar para que ningún niño, sea quien sea y esté donde esté, se quede sin su puto regalo.
Porque ahora, hostia y joder, los de siempre somos los cuatro amigos.
Jajajaja.
Ha valido la pena si te ha sacado unas sonrisas, lo demás es lo de menos
ResponderEliminar=)
Quién sabe si algún día... por aquello de que la realidad supera a la ficción...
EliminarNos vendría bien un cambio, olvidarnos de santa, los reyes, tradiciones vanas; y todo lo que traiga a la sombra el consumismo, en realidad los niños no necesitan tanto juguete, solo atención, utopía, ¿no?
EliminarAtención es lo primero que necesitan. Todos y cada uno de ellos. Pero no a todos llega, por desgracia...
EliminarSoy Cora....ese toque tan tuyo no hay quien lo iguale jajaja...:p
ResponderEliminarHola, Cora. Esquizofrénico pero en su justa medida. Gracias.:))
EliminarJajajaja la justa está bien ;)
EliminarAhora toca un merecido descanso, que en menos de nada estamos en Navidad otra vez :-(
ResponderEliminarBesos.
Si, ahora descansamos y los cuatro de antes están en el descanso eterno.:)
EliminarAtento, que
ResponderEliminarel 14 de abril,
sale el disco
nuevo .
Sí. A ver qué tal.
EliminarJe. Os podíais haber cargado de paso a sus Majestades Bobónicas... pero eso ya os lo pediré en la carta del año que viene. Y también quiero sangre, como este año, a lo Tarantino.
ResponderEliminarTenemos en mente una visita al Palacio de la Zarzuela y lo dejaremos todo de rojo.:)
EliminarMe uno al Grinch y los que no aceptáis villancicos en vuestra vida. Eso no es negociable. A partir del año que viene iremos cantando por las calles a Metálica cuando llegue la navidad. Kill,em all, qué fuerza tiene ese lema.
ResponderEliminarCuantos más seamos más podremos abarcar. Max creo que también se unirá.:)
EliminarCuando las cosas van mal lo mejor es llamar a los cuatro amigos, las cosas no irán mejor, pero al menos irán a peor más deprisa ;)
ResponderEliminarRecuerdo cuando llegó a mi vida ese disco de metallica... bufff
Al igual hemos iniciado una revolución. Tenemos el apoyo total de varias asociaciones animalistas. Esto es como acaba, no como empieza.;)
Eliminarjajaja ¡estarás contento so bruto! jajaja me vale que por un rato cambiemos los villancicos por Metálica, tb a mi me gusta, bueeno.. algunos temas ; ) peroooo... ¿ qué necesidad había de masacrar al pobre Santa y los tres reyes? al final, su pecado no era más que hacer de recaderos con los paquetes , con liberar a sus sobre explotados animales hubiera llegado, a ellos los hubierais dejado en cualquier isla del Pacífico y andando!... preparaos, el espíritu de la Navidad llenará de pesadillas vuestros sueños hasta que no les enterréis como es debido. Pobres! Además, so desagradecido jajaja te dejé un avión supersónico para hacer el reparto a tooda velocidad y ni te enteraste ; ) ... si estás pensando en degollarme, no me vas a pillar. Ya me he ido al otro lado del Planeta... te escribe mi doble ; )
ResponderEliminarHabía que pasar a los cuatro por la piedra, que llevaban siglos haciendo mal su trabajo. Nosotros, para ser el primero año, lo hemos hecho mucho mejor, que no nos hemos dejado a nadie. Otra cosa es la calidad de los regalos.:))
EliminarPues a mí me tenéis cabreao, Cabro. Como te dije, pedí carbón para la noche de reyes y el que me habéis dejado es una hulla de muy baja calidad. Baltasar siempre me dejaba sobre el zapato una antracita pata negra. A ver si os esmeráis más el año que viene o no os ajunto nunca más. 😖
ResponderEliminarEste año, al ser el primero, no ha pillado a contrapié. Seguro que ha habido un error de inventario antes de hacer el reparto. Tenemos todo un año para pulir errores.:))
EliminarEs que yo me porté muy, pero que muy mal. Aviso.
ResponderEliminarNosotros tenemos otra política de empresa. No hay problema.:)
Eliminarjajaja, me ha gustado. Pero me queda una duda... ¿que hacían los reyes Magos en el Polo Norte? ;P
ResponderEliminarEs que cuando los reducimos, nos los llevamos con nosotros al encuentro de Papá Noel, allí en Finlandia. Hacía un frío allí que tuvimos que encender una gran hoguera. :))
Eliminar🤣🤣 Estupendo, me encantó. Muy original. Abrazos
ResponderEliminarGracias. Me alegra saberlo.;)
EliminarOsti...voy a leerme más entradas de los amigos éstos tan gores!
ResponderEliminarYo odio la Navidad, pero vaya...cargarse a Santa Claus (veremos que acción toman los yankies en este asunto, yo de ellos tendría cuidado con la CIA) y cargarse a los Reyes...pues no sé...
Si lo hacen mejor ,esto de los regalos y cambiar la mentalidad de la peña pues que sean bienvenidos. Esperemos que tarden en corromperse.
Lo de Metálica...supera mis gustos musicales ...(lo siento) Para encerrarse en un auto y gritar no estaría mal ( como la protagonista de la serie "Dead to Me") aunque yo siempre he preferido "Muse" para eso...qué va a ser...para gustos colores...
Por el momento solo hay dos partes, aunque nunca se sabe: hay cierto potencial explotable ahí. En cuanto a los gustos, ahí le has dado.
EliminarYo sigo enfadada por no pasar a dejarme algo y al mismo tiempo contenta de saber que seguramente las próximas navidades tendréis arreglado el GPS.
ResponderEliminarClaro; al ser el primer año siempre salen los típicos errores de principiante.;)
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