La Madre Que Parió Al Pato Negro

    Tened cuidado, que ya han llegado las altas temperaturas, las insolaciones y las deshidrataciones. Pero sobre todo —aparte de indigentes...

    Yo intentaba escribir desde la penumbra de mi hogar. El flexo proyectaba su acogedora luz sobre la pantalla y el teclado. Todo estaba di...

    Es tan sabido que es más fácil destruir que construir, como que al humano se le da mejor lo primero que lo segundo. Un día leí que las s...

    Es la única certeza y, para serlo, no necesita actos de fe ni aprovecharse de la ignorancia. Es lo único que nos coloca a todos en una v...

     Moriste un día lluvioso de junio y el calendario se detuvo, porque te llevaste el tiempo que me quedaba por vivir, dejándome con la año...

    Retrasada 3.0 es una niñata veinteañera que nació con el código genético de las diosas —quizá Venus o Afrodita—. Lo primero que hace al ...

    Hace poco me volvió a suceder.     Por más que pasa el tiempo, siguen haciéndome mucha gracia esas personas que afirman que les gusta to...

      Me traen cierta calma de espíritu los días primerizos de junio. Tibios, de atardeceres cromáticos de intensidad decreciente. Debe ser ...